Succession [IMDb: 8.8 ; RottenTomatoes: 83% ] es una serie de HBO [página oficial]. Esta tercera temporada consta de nueve capítulos de una hora de duración, aproximadamente.
Maid [IMDb: 8.4 ; RottenTomatoes: 87% ] es una miniserie de Netflix [página oficial] de diez capítulos.
La cuestión es que vi primero Succession y luego Maid. Acerté doblemente: viéndolas seguidas y en ese orden. No lo hice adrede.
Doy mi opinión -brevísima- sobre ambas series e intento explicar porqué ha sido tan interesante verlas juntas.
Empecemos por Succession.
Poco nuevo que decir: más de lo mismo. Es decir, más de una de las mejores series de la actualidad.
En esta temporada los conflictos familiares se multiplican y agravan. Como la empresa está en peligro, todo el mundo sabe que debe posicionarse. Estás con Logan (el padre) o con Kendall, el hijo traidor.
Los hermanos intentarán una tercera vía, la estrategia ganadora definitiva: aliarse y hacer valer sus derechos conjuntos. Lástima que por todas partes haya Brutos...
Varias situaciones de la temporada me han hecho cuestionarme si Succession es un drama o una comedia. No inventemos conceptos: se trata de una tragicomedia.
Lo de Maid es otra historia. Aquí no hay atisbo de comedia. Es un drama. Un dramón.
A lo largo de la serie veremos como Alex - la jovencísima madre de la preciosa Maddie- tiene que buscarse la vida para salir adelante tras abandonar la casa del padre de su hija. Y no lo tendrá nada, nada fácil.
Por cierto, me ha sorprendido la cantidad de ayudas estatales/federales que existen en EEUU. La propia Alex afirma que ha necesitado siete de ellas, incluyendo vivienda, alimentación, becas y guardería. Incluso consigue una ayuda para el móvil.
Aquí quisiera destacar el trabajo de dos actrices. La primera es Margaret Qualley [IMDb] en su papel de Alex. Impecable.
Pero lo de Andie MacDowell [IMDb] juega en otra liga. Su papel es francamente difícil - es Paula, la madre bipolar de Alex - y lo borda.
Una curiosidad, Andie MacDowell es la madre real de Margaret Qualley .
Maid es una excelente serie. Una grata sorpresa.
Dicho lo cual, comprenderán que el acierto a verlas de forma consecutiva reside en que son dos series complementarias.
Sí, pasamos de los problemas de los multimillonarios al de los pobres...y estamos en el mismo país -Estados Unidos- y en el mismo año. Pero por lo que vemos, más bien pareciera que estuviésemos en dos universos distintos.
En Succession vemos a adultos ultraricos comportarse como niñatos consentidos y ególatras.
En Maid es una joven pobre intentando asumir la responsabilidad de su futuro y el de su hija.
Lo dicho, dos universos en las antípodas.
La cuestión es que hay un agujero de gusano que comunica ambos universos, un nexo común en ambas tramas: los personajes están atrapados por sus circunstancias.
Comentaba en mi post anterior de Succession que:
Te sueles preguntar por qué no se largan, abandonan todo y disfrutan de su fortuna.La única respuesta que he encontrado es que su ansia de poder y el saberse a la altura de su padre supera esa tentación.En Maid te das cuenta que Alex no podrá rehacer su vida hasta que abandone la ciudad donde vive y se aleje de todas las personas tóxicas que la rodean.
Por algún tipo de justicia divina, Alex conseguirá ser feliz o al menos tendrá la esperanza de poder serlo.
En Succession todos los Roy están condenados, irremediablemente condenados.
Por cierto, creo que he descubierto el maridaje de series
No hay comentarios:
Publicar un comentario